lunes, 30 de enero de 2012

Ayerbe (Huesca)

vista-ayerbe
Ayerbe es una localidad de 1100 habitantes que comprende las entidades de Fontellas y Losanglis. Se corresponde con el típico asentamiento aragonés en el Somontano pirenaico. Una climatología pocas veces extrema, temperatura media anual de 12,3º, goza en sus 6.389 Ha de un paisaje variado y bello, con contrastes de colores entre sus bosques de rivera, carrascales etc. Casi la mitad de su territorio es erial y monte bajo, dedicando el 40% al cultivo de cereal, vid, almendro y contados frutales. 

Situada a 582 m. de altitud, el inicio del núcleo urbano se sitúa en la falda del monte de San Miguel, al pie de su cuna que fue un castillo moro, extendiéndose por el llano. Es Villa de estación y mercado, que encierra entre sus muros famosas resonancias históricas cuyos recuerdos persisten en las fachadas de algunas casas, la iglesia y en la torre de San Pedro, “O Campanal” del siglo XII, donde destacan los bellos ventanales geminados, con decoración jaquesa, que le dan un aire peculiar. Hay otra torre insignia de Ayerbe, la del Reloj, siglo XVIII, y a su lado el Palacio, siglo XVI, hermosa pieza de la arquitectura civil aragonesa, que separa dos amplias plazas. 

Es famoso el ternasco y la miel, pero sobre todo las tortas, empanadicos y refollaus

Hay particularidades que hacen única a la villa de Ayerbe: "Es una localidad con una iglesia sin campanario y un campanario sin iglesia". 

Dotada de todos los servicios de un moderno municipio, actualmente el Ayuntamiento trabaja para que Ayerbe también despegue a nivel industrial.

Texto y fotografía sacados de http://www.ayerbe.es

domingo, 8 de enero de 2012

Sarrión (Teruel)

Hoy os presentamos Sarrión, otro pueblo de Teruel.

A casi 1000 metros sobre el nivel del mar, en la denominada “depresión del Mijares”, se encuentra Sarrión. Municipio de unos 1150 habitantes que pertenece a la Comarca de Gúdar – Javalambre al sureste del sistema ibérico Turolense. Son 37 kilómetros lo que la separan de Teruel y 108 de Valencia capital accediendo por la A-23. La línea férrea Valencia- Zaragoza tiene parada en la localidad y a su vez se puede llegar a pie, en bicicleta o a caballo por la Via Verde de Ojos Negros.


La situación geográfica de Sarrión ha hecho que sea un lugar de paso y asentamiento de diversas culturas a lo largo de la historia como fueron los íberos, romanos y musulmanes dejando algunas muetras como el yacimiento del “quemao” o el algibe; y también un lugar de confrontación en pasadas guerras, siendo parte de su patrimonio arrasado varias veces. Aún asi conserva verstigios importantes como: El portal de Teruel que es una de las siete puertas con las que contaba el recinto amurallado de la villaen el siglo XII y que en su interior alberga un altar dedicado a la Virgen del Pilar. Junto a él se encuentra el Palacio de Monterde que sigue el ejemplo arquitectónico de los palacios renacentistas aragoneses.

Textos e imágenes sacados de http://www.sarrion.es

viernes, 6 de enero de 2012

Bronchales (Teruel)


Hoy os presentamos Bronchales, otro bonito pueblo de nuestro Teruel.

El origen de Bronchales, puede remontarse con toda seguridad, a tiempos iberos y romanos. Así lo atestiguan los diferentes yacimientos encontrados en el término (destaca el de "El Endrinal") . 
Posteriormente, en el "Cantar de Mio Cid", podemos encontrar una referencia clara a Bronchales, verso 1475: "Trocieron a Santa María (Albarracín) e vinieron a albergar a Fronchales (Bronchales).

Como atractivo turístico dentro del casco urbano podemos encontrar un contraste que al visitante cautiva. Por un lado la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción del siglo XVI, la Ermita de Santa Bárbara del siglo XIV y varios pórticos medievales. Por otro lado, encontramos las nuevas construcciones, ocasiadas por el gran flujo turístico de la localidad. En estas últimas, destacan los edificios de piedra; la cual, además de embellecer las fachadas, proporcionan el aislados tan necesario en las zonas de alta montaña. 

Bronchales y su entorno 
Situado a 1569 m. sobre el nivel del mar y rodeado por uno de los pinares más densos de la Península Ibérica, Bronchales ocupa un lugar excepcional dentro del turismo de alta montaña.

Más de cuarenta fuentes acompañan a los caminantes que desean visitar los parajes más bellos de los Montes Universales.

Esta población turolense, da la tranquilidad necesaria para poder aislarse del estrés de las grandes ciudades, pero ofreciendo todos los servicios (farmacia, centro médico, cafeterías, restaurantes, etc...)

La calidad de las casas de turismo rural y el excelente entorno en el que está situado, hacen de BRONCHALES el lugar idóneo para pasar sus vacaciones y fines de semana. 


Bronchales, riqueza natural 
Fauna: Bronchales posee una gran riqueza zoológica. 

Son varias las especies que se pueden contemplar con facilidad. Sólo necesitamos silencio y abrir bien los ojos para poder avistar: Ciervos, Corzos, Jabalies, Zorros, Ardillas, Codornices, Perdices, Liebres, Conejos, Águilas, Buitres, Halcones, Gavilanes, etc... 

Flora: Animales y vegetación deben complementarse y es fácil suponer que con este gran número de especies animales, hay gran diversidad de especies vegetales. El extenso PINAR que ocupa más de la mitad de término municipal, en su mayoría está constituido por pino ALBAR. Unido a él aparecen otro tipo de bellas especies, como son: la jara (o estepa), fresas silvestres, acebos, etc...


Setas: Las condiciones de humedad y el generoso manto vegetal que proporciona el gran pinar de Bronchales, propician la aparición de un gran número de especies micológicas. El rebollón, la seta de cardo, la seta de san Juan, el boleto (en la zona llamado porro), etc... 


Flora, fauna y setas, necesitan algo común, AGUA. Bronchales tiene más de cuarenta manantiales, todos con una excelente calidad.

Fiestas y tradiciones 
La devoción de los habitantes se centra en su patrona, la Virgen de la Asunción, y San Roque, en cuyo honor se celebran importantes festejos en el mes de agosto. Destacan en las fiestas la celebración de festejos taurinos, pero por encima de todo la sopeta, donde el vino regalado por el ayuntamiento corre entre los asistentes y se degustan también tortas mojadas en mosto.

Cuando terminan las fiestas del pueblo, los veraneantes valencianos celebran sus fiestas en honor a la Virgen de los Desamparados, sacando en procesión a la imagen, que se conserva en un altar de la iglesia. 

Gastronomía
Entre la gastronomía de Bronchales se pueden citar las sopas de ajo, tomadas en perolicos, las migas, el ajo arriero o los asados de cordero y ternasco. Tambien embutidos, como la morcilla de arroz o la longaniza, y el jamón de Teruel. En los últimos años, también han tomado singular importancia los productos y derivadas del ciervo y javalí.

Textos y fotografías sacadas de http://www.bronchales.es

jueves, 5 de enero de 2012

Albarracín. (Teruel) Nombrado el pueblo mas bonito de España


Os presentamos Albarracín, nombrado el pueblo mas bonito de España.

Vista general
Emplazada en una colina de los Montes Universales, es ciudad medieval que se asienta en el istmo y la península que forma el río Guadalaviar. Está rodeada en sus cuatro quintas partes por un profundo tajo que hace de foso defensivo, complementado por el imponente cinto de murallas que culminan en el castillo del Andador.

Cuenta con abundantes monumentos, como la Iglesia de Santa Maria, la Catedral, el Palacio Episcopal, algunas mansiones señoriales, entre las que destaca la de los Monterde, y una peculiar arquitectura popular donde destacan la casa de la Julianeta, la casa de la calle Azagra, la plaza de la Comunidad y la pequeña y evocadora Plaza Mayor.

Pero el encanto de Albarracín está sobre todo en el trazado de sus calles adaptadas a la difícil topografía del terreno, con escalinatas y pasadizos y en el conjunto de su caserío de muros irregulares, de color rojizo, con entramado de madera, en difícil equilibrio, con aleros que se tocan. Una característica diferenciadora de la ciudad de Albarracín respecto a los pueblos de la Sierra es el empleo abundante de las estructuras con entramado de madera y tabicones de yeso rojizo que confieren el color característico al conjunto. El yeso es material característico en Albarracín, más incluso que la piedra. La arquitectura de madera y yeso es más liviana que la de piedra, lo que reduce el volumen de materiales a utilizar, y en el caso de la ciudad economiza el costo de la obra por la dificultad de acceso de los mismos a ésta.

Cada rincón, cada casa, es objeto de admiración por sus puertas y llamadores (picaportes de hierro imitando un pequeño y fantástico dragón), sus diminutas ventanas con visillos de encaje, sus balcones corridos en rica forja y de madera tallada, ... El monumento principal de Albarracín es la ciudad misma, con todo su sabor popular y aristocrático, reflejo de su historia y del buen hacer de sus gentes.

La ciudad de Albarracín está situada a 1.171 metros sobre el nivel del mar condicionando esta altitud su clima, que se puede clasificar dentro de los mediterráneos de montaña, con matices continentales, siendo su temperatura media anual de 11º y la precipitación de 480 mm. Clima y altitud han condicionado a su vegetación, siendo la sabina albar la especie clímax. Junto a ella diversas variedades de pino y de robles y encinas degradados. De gran belleza es el paisaje del rodeno, contratando su color rojo con el verde de los pinos. Las calizas son famosas por su contenido en fósiles del jurásico.

La naturaleza ha sido generosa en la Sierra de Albarracín, pudiendo encontrar en ella una gran diversidad de ecosistemas. Cañones, profundos barrancos, cortados, peñas, escarpados roquedales, parameras, valles, suaves praderas, extensos bosques... con una gran riqueza en flora (pinos-albar, laricio, pináster, sabinas, acebos, robles, quejigos...) y fauna (ciervos, corzos, jabalíes, gato montés, ardillas, ..., aves migratorias, rapaces y otras especies de gran valor).

En la Sierra encontramos también fuentes, manantiales, lagunas y nacimientos de ríos, como el Tajo, Guadalaviar, Cabriel y otros de menor importancia fluvial, formando caprichosos remansos, pozas, cascadas.... Todo esto unido al aire limpio y fresco que aquí se respira y al verdadero espectáculo que ofrece el cielo por la noche, hacen que un recorrido por estos bellos y tranquilos parajes dejen un recuerdo inolvidable al viajero.

El clima lluvioso favorece la proliferación, en otoño, de gran variedad de setas, convirtiéndose en estas temporadas en un auténtico paraíso para los micólogos, siempre que se obtenga el correspondiente permiso de los agentes forestales.

Texto e imágenes sacados de http://www.albarracin.org